El Colegio Profesional de Periodistas de Castilla y León lamenta el cierre de las cabeceras El Día de León y El Día de Salamanca, cuyo último número ha visto la luz, este fin de semana. El cierre de estos dos periódicos pone de manifiesto una vez más la difícil situación por la que está pasando el sector periodístico en España, donde el descenso de los ingresos publicitarios hace cada más difícil la supervivencia de los medios privados. Si a esto unimos la crisis propia de la prensa en papel, nos encontramos ante los principales motivos por los que estas dos iniciativas periodísticas en León y Salamanca han tenido este fatal desenlace.
Desde el Colegio Profesional de Periodistas de Castilla y León queremos mostrar todo nuestro apoyo a los compañeros que han perdido su trabajo tras estos dos cierres y abogamos por que puedan reincorporarse al mundo laboral lo antes posible y superen también la frustración de haber visto truncadas sus ilusiones con un nuevo y original proyecto de fin de semana en el que se habían embarcado, junto a la empresa editora, con el ánimo de sondear nuevas posibilidades de desarrollo.
Además, esta triste noticia no es sólo negativa para los compañeros, sino que también muy es perjudicial para el conjunto de los ciudadanos de Castilla y León, quien ve mermado su pluralidad informativa, algo de vital importancia para que cualquier sociedad democrática goce de buena salud. En este sentido, es importante recordar que el código deontológico por el que se rige la profesión periodística tiene como primer compromiso la búsqueda y el respeto a la verdad. Por este motivo es necesario remarcar el papel vital de los medios de comunicación profesionales, en contraposición a otros canales de comunicación donde el rigor y la ética no siempre están presentes.